Imagen tomada de la Web: https://images.app.goo.gl/sgueaw6sVR1tXni4A |
Las
plantas poseen un tipo de células especializadas cuya función principal
consiste en proporcionarles sostén, éstas son las células esclerenquimáticas y
su característica principal es una pared secundaria engrosada compuesta de
celulosa, hemicelulosa y lignina. Existe otro tipo de células
esclerenquimáticas, llamadas células prosenquimáticas, que son alargadas,
esbeltas y estrechas, tienen los extremos afilados y generalmente forman grupos,
llamadas fibras. Las fibras se encuentran principalmente en los tallos, pero también
en las raíces, en las hojas, en los frutos y las semillas.
Son
sustancias de andamiaje de las plantas constituidas de celulosa, las cuales
proporcionan estructura y estabilidad a las mismas. Sin embargo, una
característica importante de las fibras vegetales es su papel en la
alimentación humana, la cual las encontramos en las frutas, las verduras y los
granos. Si bien es cierto que nuestro organismo no está en capacidad de digerir
la fibra, pues pasa a través de los intestinos rápidamente, proporciona muchos
beneficios para la salud.
Una característica fundamental de la fibra vegetal es que le aporta volumen a la dieta, dando la sensación de llenura o saciedad, lo cual puede ayudar a aquellos que luchan para perder peso o para mantener un peso saludable. Además, para quienes sufren de diabetes, la fibra vegetal puede coadyuvar al mantenimiento de la azúcar en la sangre; igualmente, en casos de estreñimiento, para bajar los niveles de colesterol en la sangre y eliminar las toxinas acumuladas en el estómago.